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“Yo creí que era imposible, pero afortunadamente vi que no era así”

“Yo creí que era imposible, pero afortunadamente vi que no era así”

Rocío Then-Reyes es una madre soltera que vive en nuestra comunidad. Gracias a la ayuda que el Programa de Servicios al Residente le otorgó, pudo inscribir a sus hijos en una escuela privada y católica, lo cual era muy importante para ella. Rocío sabe que a través de la educación que hoy están recibiendo sus hijos, tendrán una mejor oportunidad de entrar a la universidad. Es una prioridad para IBA la inclusión y equidad para nuestros jóvenes que, siendo minoría, muchas veces no tienen acceso a este tipo de educación.

Rocío también se ha beneficiado de otros servicios que ofrece el Programa de Servicios al Residente y a continuación nos habla un poco de su experiencia.


¿Cuánto tiempo llevas viviendo en la comunidad Villa Victoria?

Llevo aquí viviendo en el South End desde hace 20 años.


¿Sabemos que una de las muchas formas en las que el Programa de Servicios al Residente te ha ayudado, fue poniéndote en contacto con Cathedral High School. ¿En qué te benefició esto?

Antes que nada, estamos muy contentos. Es una gran escuela, les gusta, tienen muchas actividades y una gran currícula que les va a ayudar para la universidad. Me gusta que también practican mucho deporte, pero lo principal es que está cerca de casa. Hay una gran comunicación por parte de los profesores también; todo lo que hacen los niños, todo, lo sé. Las tareas que les dejan, si llegan tarde, todo.


¿Has notado algún cambio entre su antigua escuela pública y ahora Cathedral High School?


Hay más responsabilidades, tienen que esforzarse más. Los promedios aquí son más altos que las escuelas públicas, por lo que van a salir con un nivel más alto.

La gente se asusta al escuchar que es una escuela privada en la que hay que pagar, pero no es siempre así. Gracias a la ayuda de ustedes, demostramos que no teníamos los ingresos suficientes y nos brindaron muchas ayudas. Tienen un pago establecido para familias de bajos recursos que además nos permiten pagar poco a poco, haciéndolo muy accesible.


¿Como madre, cómo te sientes de que tus hijos tengan esta oportunidad de ir a una escuela privada y así poderles dar mejores oportunidades en el futuro?


Estoy feliz porque yo estudié en un colegio Católico en mi país y quería que mis hijos tuvieran lo mismo aquí. Yo creí que era imposible, pero afortunadamente vi que no era así, que sí se puede.


Hablando ahora un poco de las distintas formas de ayuda alimentaria que ofrece el Programa de Servicios al Residente, cuéntanos cómo te han beneficiado tanto las bolsas de insumos, como los cupones de descuento.


Ayuda mucho, en mi casa somos 3 y como madre soltera todas las ayudas son buenas. A veces no llegamos a fin de mes y estas ayudas son muy importantes para todos los residentes de esta comunidad.

No solo estas ayudas benefician a familias como la mía, sino también a las personas que en ocasiones no pueden salir de casa.


Por último, nuestros eventos. ¿Qué opinas de todas las actividades, los festivales y eventos que ofrecemos en nuestra comunidad?


Me encantan, y no son solo para gente mayor, hay para toda la familia, niños y adultos. En ocasiones a pesar de ser vecinos, no nos vemos mucho y estos son los momentos en los que todos convivimos. Es un ambiente muy agradable, familiar, seguro y siempre la pasamos muy bien.



Servicios como estos son posibles gracias a sus donaciones y esperamos contar con su apoyo aquí para que familias como la de Rocío puedan salir adelante.



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